Selma Lagerlöf

Selma Lagerlöf fue una escritora sueca a la que corresponde el honor de ser la primera mujer en obtener el Nobel de Literatura, en 1909. También fue la primera en ocupar una silla, entre los dieciocho miembros varones, de la selecta Academia de las letras suecas.

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Selma Ottilia Lovisa Lagerlöf nació el 20 de noviembre de 1858 en Mårbacka, provincia de Värmland, Suecia.

Posiblemente sufrió de displasia de cadera, lo que hizo que llevara una vida bastante sedentaria, y que pasara mucho tiempo leyendo.

La situación económica de la famila era bastante mala, y al morir su padre empeoró de tal forma que Selma decidió buscar un empleo para poder mantenerse por sí misma. Su hermano la ayudó con los estudios pidiendo un préstamo, y Selma pudo estudiar docencia en el Liceo Sjöberg para señoritas, y un año más tarde, ingresó en el Real Seminario Superior para Estudios Docentes, una universidad para jóvenes y talentosas damas. Allí se hizo muy popular por sus sonetos y poemas.

En 1885, a la edad de veintiséis años, inició su profesión como maestra en la ciudad de Landskrona, donde hizo dos buenas amigas a través de las cuales fue consciente de la vida real y de los problemas de la pequeña ciudad (alcoholismo, discriminación hacia la mujer, ignorancia etc.), que dejaron huella en su carrera literaria.

Desarrolló en paralelo su vida como maestra y su afición por la escritura. En clase era muy popular por sus amenas y cautivadoras clases. Empezó a escribir para el periódico y la iglesia locales, y se interesó mucho por la vida cultural de Copenhague.

Cuando en 1888 recibió la noticia de que la propiedad de la familia en Mårbacka saldría a subasta para pagar las deudas, fue un duro golpe para ella, pues la familia se vio forzada a disgregarse, y además, fue en esta granja donde se forjó su amor por el folclore popular, que le dio a su escritura el misterio y el ensueño que se refleja en sus obras. A partir de ahí se hizo el firme propósito de trabajar sin descanso hasta poder recuperar su granja.

Se presentó a un concurso de novela con los primeros capítulos de su obra más aclamada, La saga de Gösta Berling, que naturalmente, ganó aunque no tuvo la acogida esperada. Sin embargo, unos meses después, el movimiento feminista de Öresund reconoció el valor de esta obra, y a partir de ahí, Selma abandonó su oficio como maestra en Landskrona y se trasladó a vivir a la ciudad de Falun, donde residían su madre y su hermana, para

dedicarse en exclusiva a la literatura; en el tiempo que residió en Landskrona, escribió su primera novela, La saga de Gösta Berling, la colección de cuentos Lazos invisibles y la novela Una aventura en Vineta.

Otros éxitos son: Los milagros del anticristo, Jerusalén: en Dalecarlia, Jerusalén: en la Tierra Santa, Tú me enseñas a ser libre, novelas que rápidamente la establecieron como la novelista sueca más vendida, leída y respetada.

Otra de sus obras más conocidas es Las aventuras de Nilss Holgerssön, un encargo del consejo de educación sueco para enseñar geografía a los niños, con la que hace un recorrido por la cultura, geografía, mitología y costumbres suecas de manera tan fiel, que si viajas a Suecia, parece que ya conocieras todos los lugares que aparecen en la narración. Este libro fue uno de los primeros en adoptar el nuevo sistema ortográfico mandado por una resolución gubernamental del 7 de abril de 1906, y ha sido llevado al cine y al anime.

En 1909, la Academia sueca resolvió entregar a Selma Lagerlöf el Premio Nobel de Literatura, «en reconocimiento al altivo idealismo, la vívida imaginación y la percepción espiritual que caracterizan todas sus obras». Lagerlöf se convertía de este modo en la primera mujer en recibir un Nobel de Literatura.

«La grandeza de su arte consiste precisamente en su habilidad para utilizar tanto su corazón como su genio para lograr el peculiar y original carácter y las actitudes de sus personajes, en los cuales todos nosotros nos reconocemos», dijo de ella el presidente de la Academia, Claes Annerstedt.

Para Selma, recibir el Premio Nobel significó poder recuperar la propiedad de su amada Mårbacka.

Existe un importantísimo premio literario sueco (que entrega anualmente la suma de 100.000 coronas) con el nombre de Premio Literario Selma Lagerlöf.

En la ciudad de Sunne, donde vivió, hay dos hoteles que también llevan su nombre. La casa de Selma es un visitado museo dedicado a su memoria.

Desde 1991 el Gobierno sueco la ha homenajeado poniendo su rostro en el billete de 20 coronas, válido entre 1997 y 2016, mientras que la Academia Sueca ha emitido varias series de sellos postales con su efigie.

Selma Lagerlöf ocupó los últimos años de su vida en ayudar a los escritores y pensadores a esconderse de la persecución nazi, a salir del país y luchar contra la opresora dictadura alemana.

Así consiguió, por ejemplo, un visado oficial sueco para la poetisa alemana judía Nelly Sachs, destinada por los nazis a un campo de exterminio alemán nazi, salvándola de esta desgracia.

Cuando Finlandia debió enfrentar la agresión soviética en la llamada Guerra de Invierno, la escritora donó su medalla de oro del Premio Nobel para una subasta destinada a juntar fondos para la resistencia finesa.

En medio del trabajo y el esfuerzo ayudando a los refugiados fineses, Selma Lagerlöf sufrió un ataque cardíaco que la llevó a la muerte el 16 de marzo de 1940 a los ochenta y un años de edad.